Conflicto en Editorial Atlántida: preventivos de crisis, 70 despidos y sospechas de vaciamiento

La situación de la tradicional empresa gráfica empeora con el correr de los días. La Secretaría de Trabajo aprobó el plan de la firma para reestructurarse, lo que abrió la puerta a los retiros voluntarios. Ya son 70 los empleados que se fueron por esa vía o cesanteados. Quienes siguen trabajando, cobras sus salarios en cuotas. “El vaciamiento está a la vista”, afirman los trabajadores.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

Con una actividad que incluyó la realización de dibujos que fueron subastados para juntar fondos, los trabajadores de Editorial Atlántida volvieron a reclamar el fin de los despidos, y a rechazar las últimas decisiones de la empresa, que no sólo despidió a varios empleados sino que cerró tradicionales publicaciones, como Billiken o Para Tí. Desde que en febrero se produjeron unas 17 cesantías, la situación de la firma empeoró, al punto que presentó ante las autoridades laborales un procedimiento preventivo de crisis, que fue aprobado en los últimos días. Esto dio paso a un plan de retiros voluntarios, en el marco de una “reorganización”, como afirman los representantes de la empresa.

Pero los trabajadores sospechan que existe una intención de vaciar la editorial, por lo que prometen mantener el plan de lucha, que ya generó dos paros de actividades y tres actividades frente a la sede de la empresa, como la que se hizo el pasado miércoles. Además de los despidos, que en todas sus variantes suman unos 70, los empleados están cobrando sus sueldos en cuotas, y piden un canal de diálogo más fluidos por el grupo dueño de la firma, que cambió varias veces de manos en una serie de negociaciones poco claras. Este viernes habrá una nueva asamblea para definir los pasos a seguir.

Desde que a principio de febrero se despidió con “causas inventadas” a 17 trabajadores, el conflicto en Atlántida no para de profundizarse. A partir del reclamo de los trabajadores, hubo una serie de audiencias en la Secretaría de Trabajo, donde la empresa finalmente presentó el procedimiento preventivo de crisis. “el preventivo fue impugnado por los gremios de prensa (UTPBA y SIPREBA), pero la Secretaría de Trabajo le dio lugar, por lo que pudieron avanzar con su plan de ajuste, con retiros voluntarios que se sumaron a los despidos, que hoy suman más de 70”, explicó Félix Vallejos, delegado de los trabajadores.

En diálogo con Gestión Sindical, aclaró que los retiros “son involuntarios, ya que amenazaban a los empleados diciéndoles que si no agarraban eso los ibas a despedir igual pero en peores condiciones”. Según la empresa, los cuatro últimos despidos serian los últimos, pero los trabajadores no confían en esa afirmación. “Nos vienen mintiendo sistemáticamente, no cumplen la ley porque pagan indemnizaciones que no respetan el estatuto de prensa. Además, dentro de un preventivo de crisis no pueden hacer despidos, como hicieron”, agregó Vallejos.

La actividad de este miércoles sirvió para visibilizar el conflicto que hizo que tradicionales publicaciones dejaran de tener su versión gráfica, o perdieran periodicidad. en la actividad, los integrantes de la Asociación de Dibujantes Argentinos (ADA) realizara dibujos luego subastados para donar fondos al fondo creado para sostener la lucha. Allí se aseguró que además de no pagar las indemnizaciones, los empleados que siguen trabajando están cobrando el sueldo en cuotas.

“Están incumpliendo la ley, no nos pagan en las fechas pautadas, la verdad que la situación es bastante compleja, vamos a seguir resistiendo los embates, aunque los directivos no muestran ninguna voluntad de diálogo ni de rectificar esta situación”, dijo Vallejos, que apunto al rol de acompañamiento de estas medidas de la Secretaría de Trabajo. “les dio curso al preventivo de crisis y los dejó avanzar con estos despidos a la baja”, remarcó.

En su momento, Atlántida fue líder en el sector a partir de publicaciones como Gente, El Gráfico, Para Tí o Billiken a las que le sumaban las franquicias locales de revistas internacionales como Muy Interesante o National Geographics. La editorial era propiedad del grupo mexicano Televisa hasta hace un año, y luego pasó a manos de su ex CEO Luis Castro por un valor muy bajo.

A los seis meses Castro se la vendió a un grupo de inversores argentinos, que nunca se presentaron en la empresa. Sobre esta crisis, hay diferentes hipótesis sobre el fin que se persigue. “Lo que los directivos plantean es que es una reestructuración, porque el negocio se achicó y necesitan menos estructura para sostener los productos, pero las sospechas que se trata de un vaciamiento están a la vista”, sostuvo Vallejos. Para reafirmar esto, el delegado gremial recordó que en el directorio de la firma “tenemos en el área de legales a un abogado especialista en ‘reducir responsabilidades empresariales’. Las sospechas de vaciamientos no se descartan”, finalizó.

La crisis de Editorial Atlántida no es nueva, y viene aumentando este año. Junto al despido de empleados hubo un recorte de colaboraciones, ya que muchas publicaciones dejaron de editarse. Además, una de las revistas emblemáticas como Para Ti dejó de llegar a los kioscos de diarios, mientras que Billiken, a punto de festejar su centenario, sacó su número de marzo pero compuesto en su totalidad por “refritos” de artículos que habían sido publicados con anterioridad. Solo salen normalmente sus dos revista emblema: Papparazzi y Gente.

El mercado editorial viene sufriendo fuertes achiques en el país, producto de la crisis del sector y los problemas generales de la economía del país. Según los datos, la circulación de revistas en la Argentina se redujo a la mitad y su participación en la torta publicitaria también se vio resentida. Al mismo tiempo, los costos del papel y otros insumos subieron por efectos de la inflación y la depreciación del tipo de cambio.