Conflicto con aceiteros porque Dánica quiere cerrar su planta de Llavallol y llevar la producción a Córdoba
Dánica abrió un plan de retiros voluntarios en su fábrica de Llavallol.
El gremio denunció que Dánica comenzó con un proceso de “vaciamiento” a través de retiros voluntarios para dejar de fabricar en Lomas de Zamora.
El Sindicato de Obreros y Empleados de la Industria del Aceite (SOEIA) alertó que la empresa Dorada SA que fabrica los productos Dánica, quiere ponerle punto final a sus actividades de la planta de Llavallol, en el partido de Lomas de Zamora. Con retiros voluntarios y sin reemplazos, algo que resiente las actividades diarias.
La denuncia del SOEIA se produjo en las últimas horas ante el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires y se trata, según expuso, de un proceso de vaciamiento, lisa y llanamente, en la fabrica ubicada en la localidad bonaerense de Llavallol, en Lomas de Zamora. Lo fundamental, para el sindicato, es mantener los puestos de trabajo, que son 150.
La situación se comenzó a tornar compleja en el último mes cuando, de acuerdo a la acusación del sindicato, la empresa abrió “retiros voluntarios” y no reemplazó puestos vacantes.
“Esta decisión afecta el funcionamiento de la empresa. En muchos casos se trata de puestos que resultan críticos para el mantenimiento de la producción y para cuidar la salud de los trabajadores: la planta está operando sin responsable del área de Seguridad e Higiene. Los hacemos responsables por cualquier accidente que ocurra allí”, lanzaron del lado del colectivo sindical, preocupado por un panorama oscuro.
¿Mejora? En el segundo semestre de 2024 siguen cerrando 1.600 pymes por mes, igual que en el primero
Más acusaciones a Dánica
Además, SOEIA dice que la conducción de la empresa comenzó a sacar mercadería del establecimiento y, ante las preguntas, los directivos dijeron que “la margarina se continuará elaborando en un establecimiento de Córdoba«, donde ya se estaría produciendo el producto.
También afirmaron que se dejaron de comprar insumos y se está realizando un inventario de la maquinaria de producción para ser trasladada a Córdoba.
“La decisión del SOEIA, tomada de conjunto con las y los delegados de la planta en diferentes asambleas, es hacer todo lo necesario para evitar la pérdida de los puestos de trabajo y garantizar la continuidad de la producción, en una planta que es central para la economía de la ciudad donde produce”, indicaron.
La compañía ya intentó un cierre de características similares pero en su planta de San Luis ante números que “no cerraban” en 2023. De hecho, se mencionaba la chance de trasladar la producción a Córdoba ya en ese entonces.
Problemas desde 2020
Paralelamente, la sede de Lavallol también tuvo problemas y tuvo varios reclamos de parte de los trabajadores para que las puertas no cierren.
El punto más altisonante, ocurrió en en abril de 2020, durante la pandemia, cuando la empresa comunicó que no podía cumplir con las pautas salariales: “El cierre de la planta, que impacta en la comunidad en un contexto agravado por la recesión económica y por la emergencia de COVID-19, tiene su origen en un desmedido reclamo salarial de los gremios de Federación Aceitera”, argumentaron.
Luego de la intervención de los gobiernos municipal, provincial y nacional, al poco tiempo volvió a levantar sus persianas.
Pero la firma no cumplió con lo pautado en el mes de octubre y los trabajadores del gremio volvieron a la pelea. Dos semanas después, la compañía acató la conciliación obligatoria y los empleados recuperaron sus puestos de trabajo, una pelea que continúa.
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