Aumento salarial: aceiteros rompe el techo del 35% en medio de negociaciones que se tensan

El gremio firmó una suba del 38 por ciento, y se convirtió en la mejor lograda en lo que va del año. “Marcamos un camino”, dijo el titular de la federación, Daniel Yofra, que se mostró satisfecho por el convenio firmado. En los próximos meses vencen convenios importantes, como el gastronómico o el de ferroviarios, y hay expectativas sobre los acuerdos a alcanzar.

El techo que el gobierno intentó imponer para las paritarias de este año, una variación salarial que vaya de entre un 20 y un 25 por ciento, parece ser una mera fantasía, y hoy ni los funcionarios más entusiastas y mucho menos la dirigencia sindical tiene en mente ese número a la hora de negociar. Es que la quita de subsidios a las tarifas y el aumento del transporte público dispararon la inflación nuevamente, y hoy los cálculos más optimistas –e informales, ya que estamos en “emergencia estadística” –ubican el índice de precios superando el 30 por ciento. Esto hizo que las negociaciones salariales se vuelvan una tarea tensa y delicada, y muchos sectores recurrieron a acuerdos semestrales, alentados por la idea de un mejor panorama en la segunda mitad del año.

Pero algunos gremios rompieron con ese esquema. Primero fueron los bancarios, con un acuerdo del 33 por ciento en un solo pago (que se hace 35 por ciento con algunas urnas extras). Ahora, esta semana, los aceiteros rompieron ese techo, y lograron un acuerdo del 38 por ciento, que marca una tendencia que pone en alerta al sector empresarial. Un informe asegura que las negociaciones salariales “no avanzan rápidamente”, lo que profundiza la caída de salario real. Cuáles convenios se vencen en los próximos meses y pueden convertirse en focos de tensión.

En lo que va del año, las paritarias que se fueron cerrando incluyeron aumentos semestrales o anuales, y todos rondaron en promedio el 30 por ciento. Uno de los convenios testigos fue el de los empleados de comercio, que acordaron una suba del 20 por ciento de abril a septiembre, más pagos adicionales. Los mecánicos de SMATA también firmaron una paritaria por seis meses (enero a junio), con una primera suba del 7,5 por ciento en el primer tramo y un 11 por ciento en el segundo. La UTA, en cambio, acordó un 29 por ciento en tres tramos, por un año. Esta tendencia fue rota por el acuerdo de los bancarios (33 por ciento y pago de sumas extras, que lleva al 35 por ciento el aumento en algunos casos), con la novedad que el pago será en una sola vez.

Pero el acuerdo que rompe el molde es el de los aceiteros, y es la mejor paritaria del sector. Según informaron desde la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (F.T.C.I.O.D y A.R.A.) la suba acordada con las cámaras empresariales alcanza el 38 por ciento, lo que ubicará el salario inicial, correspondiente al peón ingresante sin formación ni experiencia, en torno a los 20 mil pesos (19.690).

“Estamos satisfechos por el acuerdo, creo que veníamos con la inercia de la negociación del año pasado, que nos ayudó a que hoy las patronales entiendan que es mejor arreglar un porcentaje alto independientemente si están de acuerdo o no, que no llegar a un conflicto o un paro”, le dijo a Gestión Sindical Daniel Yofra, titular de la federación aceitera. Ya en 2015 los aceiteros habían logrado uno de los mejores acuerdos salariales, en el marco de una huelga por tiempo indeterminado que uro 25 días, y que alcanzó el 36 por ciento de suba salarial. “Las empresas especularon mucho en ese momento, pensaron que el gobierno anterior iba a trabajar para que nosotros depongamos nuestro pedido, y bajemos las pretensiones al 24, 25 por ciento. Cuando se dieron cuenta que no íbamos a deponer nuestro reclamo, tuvieron que negociar. Ahí se destrabó el conflicto”, recordó Yofra.

En cuanto a la negociación de este año, con otro color político en el gobierno, la discusión no fue demasiado distinta. “El gobierno no intervino en nada, se hizo todo al margen del Ministerio de Trabajo, por fuera”, afirmó el dirigente sindical, que sí criticó las “políticas duras hacia las clase trabajadora” de la actual gestión. En este contexto, Yofra cree que más que un ejemplo para otros gremios, pueden ser “un camino marcado”. “No sé si podemos ser un ejemplo, lo que si marcamos un camino, una conducta que gran parte de la dirigencia no tiene, el año pasado porque eran kirchneristas, este año no sé por qué. Evidentemente no responden a los intereses de los trabajadores”, concluyó.

Este porcentaje que rompe el techo de las paritarias puede ser una nueva línea de flotación para las negociaciones que se vienen. Este mes vencen los convenios del gremio de la alimentación y los trabajadores químicos. En mayo, será el tiempo de negociar para la industria textil, los empleados del plástico y los gastronómicos, mientras que en junio deben acordar transporte de carga (primera negociación para Hugo Moyano), ferroviarios y empleados de maestranzas.

Según el último informe del Observatorio del Derecho Social, entidad vinculada a la CTA Autónoma, la cantidad de negociaciones homologadas en 2015 “se mantiene en el mismo nivel de los últimos años”, apenas un 4 por ciento inferior al año anterior. En 2010 y 2014 se produjeron los picos de negociaciones, superando la barrera de los 2 mil, según destaca el trabajo, al que tuvo acceso Gestión Sindical.

Para este año, se espera que las negociaciones salariales permitan revertir el deterioro del salario real, golpeado por la inflación, que algunos ubican en torno al 35 anual. En este sentido, el trabajo del Observatorio de la CTA advierte que en lo que va del 2016 “las negociaciones salariales no parecen avanzar rápidamente”. “En efecto, en 2014 se registraron los mayores incrementos salariales de toda la década (entre un 30 y un 40 por ciento para la mayoría de las actividades), y aún así se verificó una caída del salario real”, concluyó el informe.