Alertan que en CABA a fin de mes se terminan contratos de 3 mil trabajadores de la salud
Se trata de médicos, kinesiólogos, enfermeros, camilleros y administrativos, que fueron incorporados durante la pandemia.
Gremios del sector sanitarios de la Ciudad de Buenos Aires alertaron que a fin de noviembre se vencen unos 3 mil contratos de trabajadores de la salud del sistema público, y que hasta el momento no hay información de que se vayan a renovar o pasar a planta.
Por eso, preparan medidas para reclamar a la gestión de Horacio Rodríguez Larreta que garantice la continuidad del personal, ya que afirman son necesarios para sostener la atención.
Quienes tienen en duda su puesto laboral son médicos, kinesiólogos, camilleros, administrativos y especialmente integrantes del sector enfermería, unos 2 mil del total de los contratados. Incluso en algunos hospitales ya hay falta de estos profesionales, que de concretarse las bajas se profundizaría.
Los 3 mil contratados del sector salud ingresaron durante la pandemia, para garantizar la atención durante la ola de contagios. Ahora, reclaman que se mantenga su puesto, ya que son necesarios para atender las necesidades de los hospitales y centros asistenciales.
«Son contratos que vencen a fin de mes, y estamos peleando para que pasen a planta permanente o transitoria, queremos que les den alguna seguridad que van a continuar en su cargo hasta que haya voluntad de confirmarlos en sus cargos», le explicó a Gestión Sindical Luis Ledesma, delegado de ATE en el hospital Ramos Mejía.
Ledesma remarcó que en este tiempo vienen pidiendo por la continuidad de estos trabajadores, en especial personal de enfermería, y ya lograron algunos pases concretos, pero insisten en la necesidad de una solución para el conjunto.
En estos momentos, en muchos centros asistenciales hay problemas de personal, ya que por las condiciones de trabajo y bajos salarios en pandemia hubo muchas renuncias.
Desde ATE aseguran que en el hospital Niños Pedro Elizalde (Ex Casa Cuna), por ejemplo, el gobierno porteño despidió personal de enfermería en el sector de Neonatología, por lo cual en algunos turnos hay una sola persona para atender la demanda. «Encima se quieren dar el lujo de echar a todos los contratados el 30 de noviembre», afirmaron desde el gremio.
Reclamos en marcha
Ante esta situación, ATE, la ALE y grupos de autoconvocados están analizando acciones para evitar el fin de estos contratos, que serían una especie de despidos encubiertos.
«Estamos coordinando con ATE nacional, queremos consensuar una actividad para el 23 de noviembre, en el marco del Día Nacional de la Enfermería«, adelantó Ledesma. La idea que está dando vuelta es realizar una movilización a la Plaza de los Dos Congresos, y se trabaja para coordinarla.
En tanto, la ALE ya confirmó una nueva Marcha de Antorchas para el 24 de noviembre en el Congreso. Será la segunda de su tipo, a tres años de la movida que puso de manifiesto la discriminación que sufren los y las licenciadas en enfermería en la Ciudad de Buenos Aires.
Además del pedido por los contratados, las consignas son «un bono de 10 mil pesos, salario de piso equivalente al costo de la canasta familiar; y el reconocimiento e inclusión en la Carrera Profesional y de las especialidades».
Faltante histórico
De concretarse la baja del personal contratado, el sector enfermería sumaría otro problema, que durante la pandemia se multiplicaron. Desde hace años los y las licenciados en enfermería reclaman el reconocimiento profesional en CABA, y denuncian los problemas que sufrieron durante la crisis del coronavirus.
«Desde la Asociación de Licenciados en Enfermería realizamos varias asambleas, y vamos a ir a una acción de lucha por el tema de los contratados», confirmó Carolina Cáceres, referente de la ALE en el hospital Tornú.
En diálogo con Gestión Sindical, afirmó que unos de los reclamos principales que se están haciendo ante las autoridades es la continuidad laboral de este grupo de trabajadores, «junto con el reconocimiento profesional y salarial».
«La situación del personal de enfermería es desesperante, junto con los pedidos históricos estamos sumando el pase a planta de los contratados para asistir en esta pandemia», agregó Cáceres.
La ALE, que durante todo este tiempo realizó acciones contra estas situaciones, denunció que «el gobierno porteño no sólo precariza al personal de enfermería, sino que ni siquiera se compromete a mantenerles el puesto laboral, es tremendo».
En junio de este año, unos 50 trabajadores del sector enfermería del hospital Durand de la Ciudad de Buenos Aires renunciaron a sus cargos, y denunciaron «las malas condiciones laborales que deben afrontar en plena pandemia».
Según los gremios, durante este tiempo fueron 2 mil los trabajadores de esa área que dejaron sus cargos, empujados por esta realidad. «Es muy doloroso, sobre todo después de haberle puesto el cuerpo a la pandemia, como venimos diciendo somos totalmente descartables para el gobierno porteño», afirmó Cáceres.
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