Aceiteros no descartan un paro nacional luego del fracaso en las negociaciones paritarias

Desde Ftciodyara atribuyen la intransigencia de las patronales a que se sienten fortalecidos por la necesidad imperiosa del país de obtener divisas vía liquidación y por la suba internacional de los precios. “Esto ya es un tema más político que de paritarias”, expresó Cristian Montaño, secretario de prensa de la organización. Y agregó: “Lo que pasa es que saben que ellos son los que tienen la manija ahora”.

Por Claudio Garibotto

La Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines (Ftciodyara) y las cámaras patronales Ciara, Ciavec y Carbio fracasaron en el intento de acordar la revisión salarial 2020 y, como consecuencia, la organización sindical decidió de inmediato el quite de colaboración. Además, anunció que en las próximas horas llevarán adelante otras medidas de fuerza, que pueden incluir un paro nacional.

“La verdad es que no quieren negociar. El miércoles 18 y el martes 24 de este mes tuvimos dos reuniones, que incluso fueron presenciales, y tampoco se logró nada. Y fueron dos conciliaciones voluntarias, porque las obligatorias ya se vencieron. Y aceptamos seguir dialogando porque nos pidió el Gobierno que lo hiciéramos. Pero no sirvió de nada”, le dijo Cristian Montaño, secretario de prensa de Aceiteros, a Gestión Sindical.

Además del quite de colaboraciones, agregó Montaño, “no se está trabajando ni feriados ni fines de semana. Y tampoco se deja entrar a los contratistas”. Y contó que están unidos con la Unión Recibidores de Granos y Anexos de República Argentina (URGARA) para llevar a cabo el plan de lucha. “Ellos están peor todavía, porque tienen vencida las paritarias desde julio”, precisó. Y adelantó que “si la semana que viene no hay novedades empezaremos a analizar el hacer un paro nacional”.

Un comunicado del sindicato difundido inmediatamente después de la frustrada negociación expuso que “los empresarios llevaron la negociación al fracaso total. Los patrones nunca tuvieron voluntad de negociar y empujaron al conflicto a todas las organizaciones gremiales para generar las condiciones sectoriales que, como cortina de humo, justifique la baja liquidación de divisas con las que aportan a la embestida de devaluación contra el peso y el Gobierno. También presionan por nuevas medidas en beneficio de sus propios intereses”.

En ese sentido, Montaño opinó también que “esto ya es un tema más político que de paritarias”, y dijo: “Lo que pasa es que saben que ellos son los que tienen la manija ahora. Los que mueven la economía. Antes eran los bancos y el petróleo, y ahora son los granos. Esa es la realidad”.

En la actualidad, el sueldo básico está fijado en 69.700 pesos. Y los trabajadores estaban solicitando un salario básico de 81.670 pesos, retroactivo a agosto. Aunque, aclaró Montaño, “ahora el reclamo está en alrededor de los 83.000 pesos, porque obviamente la demanda se va actualizando” de acuerdo al costo de vida.