Furlán advirtió sobre el rumbo del Gobierno de Milei: “Todas las semanas hay malas noticias”.
El líder de la UOM, Abel Furlán, advirtió que la industria argentina queda en una posicion de extrema debilidad frente a Trump.
El líder de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Abel Furlán, volvió a mostrar su preocupación sobre el rumbo del Gobierno de Javier Milei, y planteó sus quejas por la apertura de importaciones, que ya causó 22.000 despidos y profundiza la desindustrialización.
Rsumiendo la actualidad como que “todas las semanas hay malas noticias”, el dirigente sindical apuntó contra el rumbo económico y la paralización de la obra pública, remarcando que la situación empeora “día a día” y que podría derivar en una “crisis social” si no se revierten las políticas actuales.
Furlán planteó que el Ejecutivo nacional constantemente “profundiza un proceso de desindustrialización”, lo que afecta tanto al empleo como al entramado productivo nacional.
Para Furlán, todos los sectores están afectados
Respecto de la política exterior, el líder metalúrgico manifestó sus dudas sobre los efectos de los recientes acercamientos comerciales, al considerar que los acuerdos con Estados Unidos y la Unión Europea podrían dejar al país “muy relegado” y con escasas herramientas para proteger su estructura industrial.
«El acuerdo con Estados Unidos no va a traer buenas noticias. Vamos a quedar muy replegados y con muchas debilidades para proteger el entramado productivo», indicó.
En ese sentido, marcó una diferencia: “Los países centrales se disputan el trabajo calificado y defienden su productividad. Argentina va en contramano de esa realidad mundial”.
El sindicalista hizo hincapié en cómo la paralización de la obra pública está generando una cadena de impacto negativo sobre la mayoría de los sectores.
Según explicó, los primeros trabajadores afectados son los de la construcción, pero el golpe se traslada rápidamente a ramas vinculadas, como la metalurgia. Y recordó su experiencia en los años 90, cuando el sector pasó de 570.000 a 65.000 trabajadores, una pérdida que llevó décadas revertir.
En el plano político y sindical, insistió en la necesidad de definir “qué modelo de desarrollo, producción y trabajo” se propone a la sociedad. Además, rechazó la idea de que la legislación laboral sea un obstáculo para el crecimiento y la competitividad del país: “Argentina supo crecer y generar empleo con esta legislación. No somos quienes fugamos divisas ni generamos endeudamiento”.
Derechos laborales y sindicatos, en riesgo
Sobre el escenario internacional, Furlán también consideró que un eventual liderazgo más firme de Donald Trump podría exigir mayores contraprestaciones a la Argentina.
Y por último mencionó las tensiones dentro de la CGT frente a las políticas gubernamentales, señalando que muchos dirigentes ven un riesgo claro de que se avance sobre derechos laborales y estructuras sindicales en beneficio “de las multinacionales y los sectores más poderosos”.
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La postura crítica de Furlán se viene profundizando en el último tiempo. Hace sólo un mes, por ejemplo, había planteado que es necesario mostrar “rebeldía” para poder afrontar el “industricidio” que provocó Milei.
Además de realizar un llamado a la acción, dijo que el mundo sindical tiene “una responsabilidad histórica: mostrar rebeldía frente a este proceso y tratar de sostener el proceso de industrialización, que es lo que le da dignidad al pueblo argentino”.
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