Investigadores y gremios “velan” a la ciencia, amenazada por el recorte y los despidos

Convocaron a un velorio público para el próximo martes, contra el recorte en el sector y la exclusión de unos 500 becarios del CONICET. Desde el colectivo Jóvenes Científicos Precarizados (JCP) denuncian que “se cortó el canal de diálogo”, por lo que el conflicto está estancado. Mediante un documento, se exigirá al presidente y el ministro Barañao una solución al tema: “cientos de trabajadores científicos quedarán en la calle”.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

De riguroso negro y con flores, investigadores, becarios y trabajadores del sector científico argentinos realizaran el próximo martes una insólita protesta: un velorio público de la ciencia nacional. La medida se toma en el marco del conflicto desatado en el área, por el recorte realizado por el gobierno nacional, que entre otras cuestiones dejó afuera del CONICET unos 500 científicos, que hasta el momento no fueron reubicados. La medida es parte del plan de lucha que llevan adelante los distintos colectivos y gremios, y cuenta con el aval de reconocidos investigadores nacionales. Durante la jornada, se volverá a difundir a denunciar el recorte del presupuesto, y a reclamar que el Congreso trate una iniciativa para asegurar el financiamiento de las investigaciones en curso. Además, le reprochan al Ministerio de Ciencia y Tecnología nacional haber roto los canales de diálogo para llegar a un acuerdo.

Como sucedió en diciembre pasado, los científicos se movilizarán junto a colectivos de becarios y gremios del sector para rechazar el ajuste y recorte presupuestario en el área. “El velorio de la ciencia” tendrá lugar el próximo martes a las 10 frente a la sede de la cartera científica, convocada por diversos sectores. la medida se definió luego que el gobierno no diera respuesta a los reiterados pedidos para la reincorporación de los 500 becarios expulsados del sistema, luego de la baja en los fondos destinados al área, en especial el CONICET, el instituto de desarrollo más importante del país. “Vamos a velar la ciencia, ante un panorama desolador en que se encuentra”, le dijo a Gestión Sindical Lucia Maffey, integrante del colectivo Jóvenes Científico Precarizados (JCO), uno de los convocantes a la actividad. La investigadora se quejó que el Ministerio de Ciencia “rompió todo diálogo”, por lo que el conflicto quedó “estancado sin una solución a la vista”.

El conflicto en el sector se inició por un fuerte recorte en los fondos del CONICET y otros institutos, que obligó a dejar a unos mil becarios fuera de la carrera de investigador. Luego de permanecer en diciembre varios días ocupando el edificio del barrio de Palermo donde funciona la cartera que comanda Lino Barañao, se llegó a un principio de acuerdo, con la incorporación de 500 becarios, mientras el resto se debían reubicar en otros sectores, como universidades. Pero la hoja de ruta no se completó, y la situación quedó estancada. Con apoyo de bloques opositores, se elaboró un proyecto para garantizar la financiación del sector, pero ante la oposición del oficialismo, está tambiñen paralizado. “El Congreso está en receso, por ahora el proyecto sólo fue tratado en comisiones, pero no se sabe cuándo puede pasar al parlamento”, agregó Maffey.

En cuanto a la actividad del martes, además del velorio simbólico se realizará la lectura de un documento consensuado, dirigido al presidente de la Nación Mauricio y el ministro Barañao. Según el texto, al que tuvo acceso Gestión Sindical, el recorte del sector alcanza los 190 millones de pesos, lo que dificulta el normal desarrollo de tareas. “Este brutal recorte se tradujo, entre otras cosas, en la decisión del directorio de CONICET de excluir a 498 compañeros que habían sido recomendados/as por todas las instancias de evaluación para su ingreso a Carrera de Investigador Científico, es decir, a la planta permanente del organismo”, recordaron. “A más de 7 meses de la firma del acta acuerdo, vemos con profunda preocupación que no se ha avanzado en solucionar la situación de los investigadores excluidos. A excepción de 47 compañeros que ingresaron al CONICET mediante recursos de reconsideración, las restantes 451 personas continúan sin novedades acerca de su futuro inmediato. Esta situación coloca a los compañeros en un estado de constante incertidumbre en el que desconocen si en enero de 2018 quedarán en la calle luego de años de trabajo en el sistema de investigación público”, se quejaron los colectivos.

“No podemos más que asumir que son plenamente conscientes de que esta política se traducirá en la desaparición de líneas enteras de trabajo que el Estado mismo fomentó durante años, al mismo tiempo de que cientos de trabajadores científicos y sus familias quedarán en la calle”, alerta el documento, que reclama “una respuesta inmediata por parte de su gobierno a los cientos de científicos que en pocos meses podrían quedar nuevamente en la calle”.