Primeras consecuencias del #7M: el gobierno convocará al diálogo a gremios industriales

Fuentes sindicales aseguran que la semana que viene serán recibidos por funcionarios del gobierno, que buscan bajar la tensión luego de la marcha de este martes. Poca expectativa por lo que puede salir de la cumbre, que no alcanzaría para frenar el paro nacional. En el sector, el más golpeado por las políticas oficiales, crece el descontento con el accionar del triunvirato que maneja la CGT.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

En un inicio, la marcha del 7 de marzo de la CGT fue motorizada por el sector industrial, que luego de un plenario decidió llamar a una manifestación contra la política del gobierno nacional, que golpea con fuerza industrial como la metalúrgica o la automotriz. Con el correr de los días, la jornada se fue masificando, y fue tomada como propia por la central obrera, las dos versiones de la CTA y movimientos sociales y políticos. Pero de fondo quedó siempre como eje la crítica a la falta de una política industrial de la gestión de Mauricio Macri. En la Casa Rosada parecen haber tomado nota de esto, porque en las últimas horas comenzaron a circular versiones de una “inminente convocatoria” a algunos de los referentes del área, para calmar las aguas. La iniciativa no fue formalizada, pero entre los gremios hay “pocas expectativas” de lo que pueda surgir de una eventual reunión. En tanto, otros sectores comenzaron a presionar para ponerle fecha al paro nacional, que sigue sin concretarse.

Las versiones informales que recogieron varios medios apuntas a una “inminente convocatoria” a los gremios industriales, que estaría pensada para martes o miércoles de la semana que viene. Ese día, funcionarios del gobierno buscarían bajar la tensión con sectores muy golpeados por la situación laboral de estos días, como los mecánicos del SMATA, los metalúrgicos, además de los sindicatos que representan a los trabajadores de la industria del calzado, la textil y la vinculada con la construcción. “Tenemos entendido que nos convocarán a dialogar la semana que viene”, le dijo a Gestión Sindical una fuente del sector cuyo gremio está entre los mencionados para ser llamado al diálogo. Pese a no tener confirmación oficial, los industriales piensan ir a la convocatoria, pero sin mayores expectativas. “Iremos como siempre que nos llaman, pero más que palabras queremos hechos, se acabó el tiempo de las promesas”, recalcó la misma fuente.

Lo que en los gremios se apuran en aclarar es que “es poco probable” que de esta reunión surja alguna medida que baje la tensión en el sector, y que pueda desinflar el reclamo masivo de un paro nacional. Es más, recordaron que en algún momento desde el gobierno se anunció que se pondrían límites a algunas importaciones, uno de los ejes del malestar, pero que no cumplieron. “Dijeron que iban a frenar la entrada de calzados, después que iban a poner un límite de 20 millones de pares, y hoy hay 24 millones de pares importados, que generaron despidos masivos en el sector”, recordaron.

Por la situación de las importaciones, entre los gremios industriales no sólo crece el rechazo al gobierno, sino que hay cada vez más descontento con la conducción de la CGT, que se profundizó con el no llamado al paro del pasado martes. Ese día, una de las columnas más nutridas fue la de la UOM, cada vez más cerca de la Corriente Federal de los Trabajadores, el radicalizado espacio dentro de la central obrera que lidera el bancario Sergio Palazzo. “Creo que la situación excedió al triunvirato”, admitió un dirigente del sector industrial a Gestión Sindical, en estricto off. Incluso, aseguró que muchos están pensando “en barajar y dar de nuevo” respecto de la conducción actual. “Le están dando la razón a muchos de los que decían que sus compromisos políticos con el massismo eran un problema”, agregó.

En tanto, sobre la posible fecha del paro, crece entre los gremios la opción de hacerlo el 30 de marzo, cuando se cumpla un nuevo aniversario de la jornada de 1982 que reclamó por “pan, paz y trabajo”, encabezada por la CGT de Saúl Ubaldini y que es un hito de la lucha de la central obrera, durante la dictadura. Esa fecha es la elegida por la Corriente Federal, por ejemplo, que aseguró mediante un comunicado que “es necesario y urgente” definir una jornada de lucha, y recordó que el paro nacional ya fue aprobado por una reunión de consejo directivo. En tanto, desde la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) se reunirán mañana viernes para definir una fecha. En el sector, uno de los referentes como es Omar Maturano afirmó que el 4 de abril sería la elegida, pero se confirmará recién en el cónclave con uno de los sectores más combativos de esta nueva etapa. La fecha final se confirmará en una reunión a realizarse el jueves próximo, donde el triunvirato además de dar el paso exigido pondrá en juego su liderazgo y conducción.