Venta de IMPSA: la primera privatización de Javier Milei pone en riesgo 660 puestos laborales
El Gobierno anunció que transferirá las acciones a un grupo estadounidense y crece la incertidumbre sobre el futuro de los trabajadores de la metalúrgica.
El Gobierno nacional oficializó este miércoles la primera privatización de Javier Milei, al anunciar que venderá sus acciones de la empresa Industrias Metalúrgicas Pescarmona S.A. (IMPSA) a la compañía de capitales estadounidenses ARC Energy. Y la noticia generó incertidumbre entre los 660 trabajadores de la firma, quienes no saben qué será de su futuro.
«Privatizamos IMPSA. Gran trabajo en equipo de Juan Pazo, Pablo Lavigne y el gobernador Alfredo Cornejo», celebró el ministro de Economía, Luis Caputo, al hacer el anuncio en sus redes sociales.
En tanto, desde el Ejecutivo se indicó, a través de un comunicado de prensa, que ARC Energy ofertó 27 millones de dólares en concepto de aporte de capital, sujeto a un cronograma de integración de acuerdo con las necesidades de la empresa.
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Además, solicitó un plazo hasta el 31 de enero para obtener el refinanciamiento de la deuda con los acreedores de IMPSA por US$576 millones.
La oferta aprobada fue la única presentada luego de un largo proceso para lograr la privatización de la empresa. “En su análisis, la Comisión concluyó que se acreditaron las condiciones de idoneidad, capacidad económica y financiera de los principales accionistas de IAF para cumplir con la capitalización que requiere IMPSA y su gerenciación”, expresaron desde la Casa Rosada.
El capital de IMPSA se integra con tres tipos de acciones: las clase A, en manos de la familia Pescarmona con un 5,3%; las clase B, en manos de los acreedores con un 9,8%, a través de sendos fideicomisos de garantía; y las acciones clase C, que pertenecen al FONDEP en un 63,7% y el 21,2% restante a la provincia de Mendoza.
Desde el gobierno expresaron que la decisión de desprenderse de las acciones en poder del sector público se encuentra alineada con el “objetivo déficit cero del Gobierno nacional y la no asignación de recursos federales a empresas privadas».
Y dejaron abierta la posibilidad de que la empresa continúe la actividad de forma saneada en un marco de economía de mercado. Además, aseguraron que «la provincia de Mendoza manifestó su voluntad explícita de acompañar la decisión del gobierno federal».
Qué hace la empresa
Según los datos del Ejecutivo nacional, IMPSA arrastra una deuda de más de US$ 570 millones, principalmente con el Banco Nación, el BICE y el BID, que los inversores estadounidenses buscan renegociar y tener un principio de acuerdo para el mes próximo.
La histórica metalúrgica realiza trabajos en el país para la represa Yacyretá; las tres centrales nucleares que gestiona Nucleoléctrica, YPF y otras petroleras que operan en Vaca Muerta, así como grandes compañías a nivel local e internacional.
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Actualmente emplea a 660 trabajadores, quienes, como fue señalado, no saben si serán mantenidos en sus puestos.
Fundada en 1907, IMPSA se dedica a la fabricación de equipos tales como turbinas, grúas y reactores, abasteciendo a los sectores de metalurgia, de generación de energía y tecnología, siendo una de las principales empresas argentinas en estos últimos sectores.
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