La advertencia de Aguiar a los gobernadores que le allanan el camino a Milei: «Van a pagar»

El líder de ATE analizó lo que significó el primer año de Javier Milei. Las críticas de Rodolfo Aguiar y su intención de seguir resistiendo.

El secretario general de la Asociación de Trabajadore del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, decidió brindar su mirada sobre lo que representó para el sindicato y su actividad sindical este primer año de Javier Milei. Un gobierno que se propuso desguazar la planta de personal estatal y que tuvo marchas y contra marchas.

Para Aguiar, detrás del plan económico y de las intenciones del oficialismo, hubo algo más profundo:
“el 2024 es el año en el que empezó a morir la democracia, se selló la suerte de quienes garantizan gobernabilidad y apareció el coraje de los estatales”.

“Las empresas mayores que cotizan en bolsa aplauden de pie y seguramente bailarán y reirán a carcajadas en esta Navidad, mientras que nuestros jubilados y más de un millón de niñas y niños no tendrán nada para comer”, agregó el secretario general de ATE.

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Y evaluó que “el 2024 es el año de la barbarie en el que empezó a morir la democracia, se selló la suerte de quienes garantizan gobernabilidad y apareció el coraje de los estatales”.

Aguiar: «Los estatales no tuvieron miedo»

“En el primer año de Milei, pretendieron despojarnos de todos nuestros derechos, corrompiendo a algunos senadores y diputados. Compraron una Ley Bases y llevaron adelante una reforma laboral que aniquila las principales conquistas del movimiento obrero», analizó el dirigente.

«Se propusieron destruir el Estado, desguazarlo, rematar todo el patrimonio estatal pero no pudieron. Los estatales no tuvieron miedo y fue su decisión de luchar la que evitó el despido de 150.000 de empleados públicos, el cierre de organismos públicos y le puso cierre a la privatización y venta de varias empresas estatales”, agregó.

Desde el mismo mes en que asumió este Gobierno, ATE realizó más de 40 medidas de fuerza en todo el país que incluyeron paros, movilizaciones, jornadas de lucha, cortes de ruta y tomas de ministerios y organismos públicos.

Los gobernadores, apuntados

“En este primer año de Milei también sellaron su suerte los gobernadores y sectores políticos que garantizaron gobernabilidad para que se destruyera la Argentina, se terminara con el federalismo y se entregara nuestra soberanía», continuó el dirigente estatal.

«Son estos gobernadores los que una vez superada esta crisis profunda que genera el ajuste, pagarán un costo político mayor aún que el del propio Presidente de la Nación”, añadió.

Aguiar sostuvo que este también “fue el año en que empezó a morir la democracia” y agregó: “Se vedó el ejercicio de uno de los poderes de la República, gobernando por decreto y prácticamente clausurando el Congreso. Se afectaron garantías constitucionales mediante la violencia y represión”.

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“Pasó un año del nuevo Gobierno, y si de algo podemos estar seguros es que con las políticas que se impulsaron ganaron muy pocos y perdimos casi todos. Las empresas mayores que cotizan en bolsa aplauden de pie y seguramente bailarán y reirán a carcajadas en esta Navidad, mientras que nuestros jubilados y más de un millón de niñas y niños no tendrán nada para comer”, concluyó el secretario general de ATE.

Ganadores y perdedores bien claros

Los números le dan la razón a Aguiar. balances de las principales empresas que cotizan en la bolsa de valores dieron resultados más que positivos en este año: las compañías de hidrocarburos (YPF 829%, Pan American Energy 375%, Tecpetrol 2.731%), las alimenticias (Arcor 941%, Molinos Ríos de la Plata 1.119%, Mastellone Hermanos 9.997%); las bancarias (Santander 752%, Macro 2.715%, BBVA 127%), las farmacéuticas (Laboratorios Richmond 9.851%), entre otras.

En tanto, la suerte de los trabajadores y jubilados fue completamente distinta: el poder adquisitivo de los estatales cayó un 39% en lo que va del año. Los jubilados también tuvieron una importante caída en sus haberes, con el agregado de que quienes cobran jubilaciones y pensiones más bajas fueron los que más perdieron, y además se les arrebató el derecho de acceder a medicamentos gratuitos. Y en el sector privado cerraron 16.500 pymes y se perdieron más de 261 mil puestos de trabajo.