Paro de colectivos: llueven críticas a la UTA, tras levantar la medida y acordar por la mitad de lo que pedía
Roberto Fernández, el principal apuntado tras la caída del paro de colectivos.
Según trascendió, el aumento que desactivó el paro de colectivos llegará al 13,2% en enero. El pedido del gremio era del 24,7% retroactivo a agosto.
El día posterior al acuerdo entre la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el Gobierno y las cámaras empresarias para desactivar el paro de colectivos vino con criticas a Roberto Fernández, el líder del gremio que representa a los colectiveros, y contradicciones en el propio Gobierno, que en este caso sí accedió a aumentar subsidios.
Los primeros dardos a Fernández llegaron de parte del moyanismo. Pablo Moyano, secretario general de la CGT y una de las caras de Camioneros, ya había criticado que la UTA no se hubiera sumado al paro nacional de transporte del miércoles. Intuía, ante los suyos, que finalmente iba a pactar con los empresarios con la venia de la administración libertaria.
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“Fernández amenaza y acuerda, siempre fue su estilo”, dijo por lo bajo ante Gestión Sindical un dirigente del riñón del Camionero, que lamentó la movida de la UTA ya que si se hubiera sumado le habría dado aún más contundencia a la medida de fuerza que llevó a la parálisis de trenes, aviones, subtes, transporte marítimo y fluvial.
El dirigente del Polo Obrero Eduardo Belliboni también le apuntó a la conducción del sindicato de los colectiveros al señalar que “es histórico que traiciona a sus trabajadores”. Y desde el sindicalismo de izquierda cuestionaron a Fernández por “dividir” el paro y terminar acordando.
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Para el gremialismo más combativo, Fernández y la UTA dejaron en claro el rol que vienen jugando y la predisposición de colaborar con la gobernabilidad de Milei, “negándose a discutir de cara a la base de los trabajadores y usando su poder de fuego para negociar con las cámaras empresarias y con el oficialismo, de espaldas a los choferes y también a los millones de usuarios”.
El rol del Gobierno
La UTA reclamaba un aumento del 24,7% con retroactividad a agosto sobre el salario actual de los choferes, con trabajadores de transporte público que perciben un salario básico de $1.060.000. Los empresarios pidieron mas subsidios o actualizar el costo del boleto.
Finalmente, en la negociación paritaria, el acuerdo estuvo muy lejos del reclamo inicial: el básico pasará a $1.200.000 (un 13,2% por sobre los $1.060.000 actuales) y recién en enero de 2025.
En un primer momento, cerca de Javier Milei señalaron que no iban a otorgar más subsidios de los ya establecidos para sostener el incremento salarial que pidió el gremio. “No hay más plata, los subsidios ya fueron establecidos”, indicó un funcionario en la tarde del miércoles al tanto de las negociaciones. Pero esa postura fue archivada para desactivar la huelga y no sumar otro foco de conflicto.
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Según trascendió, la Casa Rosada dio el visto bueno para ceder $18.700 millones mensuales más en concepto de subsidios, sin aplicar una suba de tarifas, porque considera que podría tener un impacto negativo en la inflación.
De acuerdo con el acta que se suscribió, el sueldo de los choferes de colectivo subirá escalonadamente hasta el primer mes de 2025. Con esta escala, a partir del 1° de noviembre “se establece un salario básico conformado de $1.140.000″, desde el 1° de diciembre será de $1.160.000, y en enero del próximo año llegará a $1.200.000. En todos los casos, este incremento se hará “proporcional al tiempo trabajado”.
La Secretaria de Trabajo de Julio Cordero participó del entendimiento, el cual contó con la participación de dirigentes de confianza de Fernández y las principales cámaras empresariales, AAETA, CEAP, CTPBA y Ceutupba.
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