Paritaria de la UOM: una cámara empresaria acusó al gremio de hacer «un pedido desmesurado»
José Luis Ammaturo, presidente de CAMIMA, consideró que el aumento pretendido por los metalúrgicos «destruiría a las PyMEs».
La falta de acuerdo en la paritaria de la UOM sumó un nuevo capítulo: luego de que los dirigidos por Abel Furlán lanzaran un plan de lucha con tres paros nacionales, desde una de las cámaras empresarias apuntaron fuertemente contra el gremio.
Según evaluó José Luis Ammaturo, presidente de la CAMIMA, cámara de pequeñas y medianas industrias metalúrgicas, no se trata de que el sector empresario «no quiera negociar» sino que apuntan a mantener el poder adquisitivo, pero la UOM «hizo un pedido desmesurado» que «destruiría a las PyMEs».
Además, el también titular de la Junta Directiva de la UIA y pro Tesorero de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA), acusó al gremio de tener una posición política y no gremial.
«Como presidente de una de las Cámaras Metalúrgicas paritarias niego rotundamente que el sector empresarial no quiera negociar», expresó a través de un hilo de Twitter quien en abril fue anunciado como candidato a intendente de Quilmes por la lista de Javier Milei, aunque finalmente en junio renunció a la postulación.
Para Ammaturo, el gremio se mostró «combativo»
Ammaturo insistió en afirmar que «la premisa siempre fue mantener el poder adquisitivo de los salarios acompañando la inflación, por eso propusimos una metodología de ajuste para evitar el desgaste continuo de la discusión por la pérdida de valor de la moneda».
Y apuntó que «la UOM, desde el 1er día, hizo un pedido desmesurado en base a la inflación medida, y se mostró combativo y sin miras a una negociación rechazando la mesa de negociación en el ámbito del Ministerio» de Trabajo.
Asimismo precisó que la exigencia del gremio era que se otorgue «un 43% en julio por solo un trimestre y en un solo tramo», lo cual «destruiría económica y financieramente a las PyMEs». Y agregó que «el bono es una imposición que nada tiene que ver con una recuperación salarial».
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Por último, explicó que detrás del reclamo hay un tinte político: «Lamento profundamente el daño que posiciones intransigentes hacen a la economía y a los ingresos de los trabajadores, posiciones que tiene que ver más con la situación política del país que con la gremial».
Como fue señalado, en las últimas horas del viernes pasado la UOM definió un plan de lucha, que se llevará a cabo con la realización de tres paros nacionales. El primero será mañana, de 10 a 21, e incluye una movilización al edificio Catalinas.
El aumento que pide la UOM
Luego, la siguiente medida de fuerza, en ese caso por 48 horas, comenzará este jueves. Mientras que la tercera huelga será por 72 horas, y desde el 26 de julio.
El Consejo Directivo del sindicato fue el que terminó de definir la acción gremial en las últimas horas del viernes, durante una reunión de las regionales que se realizó en Córdoba. Y cuenta con el apoyo unánime de los 54 secretarios generales de todas las seccionales metalúrgicas del país.
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Según informaron desde el propio gremio, lo que están reclamando es la revisión de su primer acuerdo del año, correspondiente al trimestre abril-junio, con un adicional de 10 por ciento por encima del 18,8 por ciento pactado en esa oportunidad.
También busca añadirle un 30 por ciento más, de carácter acumulativo, para el período de julio a septiembre, así como el pago de un bono extraordinario de 60 mil pesos no remunerativos por el Día del Metalúrgico (7 de septiembre) y un plus por zona desfavorable.
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