El espacio Basta de Asesinatos Laborales marchó para pedir justicia por David Ramallo
El trabajador de la Línea 60 murió en los talleres de la empresa y la Justicia podría cerrar la causa. La movilización pidió por otros casos similares.
Con una marcha realizada el jueves, el espacio Basta de Asesinatos Laborales (BAL) volvió a repudiar la situación que viven los trabajadores en materia de seguridad, y pidieron justicia por quienes perdieron la vida en sus puestos laborales.
La fecha elegida fue el quinto aniversario del fallecimiento de David Ramallo, electricista de la Línea 60 de colectivos que fue aplastado por una unidad en el taller de Barracas, cuando realizaba refracciones. Por estos días, denunciaron, la causa podría cerrarse.
El espacio Basta de Asesinatos Laborales se conformó en 2017, y está integrado por familiares de las víctimas y trabajadores de distintos sectores sindicales. Su consigna central es «denunciar lo que las empresas ocultan, lo que los sindicatos ignoran, los que los gobiernos callan y lo que los grandes medios tergiversan: ¡si pudo evitarse no fue un accidente, es un asesinato laboral!».
En esta nueva actividad, se marcó desde la cabecera Barracas de la Línea 60, donde se hizo una misa, hasta las puertas del INTA (Rivadavia 1439), para recordar a Diego Soraire, trabajador del organismo que murió cuando le explotó un biodigestor. Más tarde, la actividad finalizó en los tribunales de Lavalle y Tucumán, pidiendo que no cierren las causas.
Desidia judicial
«Venimos de que el fiscal Marcelo Retes intente cerrar la causa sin tener en cuenta las pericias de parte ni la de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) ni de la Policía Federal. Y logramos con la movilización anterior que se cite a declarar a los testigos de la empresa y a los testigos presenciales compañeros de David que presenciaron el hecho», dijo en la jornada Santiago Marconi, referente del colectivo, respecto de la causa de Diego Ramallo.
La jornada nacional de protesta, explicó Menconi, se enmarcó en un reclamo especial: «La venimos llevando desde hace cinco años y se enmarca en un pedido nuestro, que es que se declare el Día del Asesinato Laboral, para visibilizar lo que viene pasando, para exigir justicia por las víctimas y para no seguir teniendo que lamentar fallecimientos en los lugares de trabajo».
Caso Ramallo
«David era electricista de la línea 60. El 9 de septiembre de 2016, en una cabecera que estaba habilitada provisoriamente con un montón de irregularidades, va a reparar un colectivo. El colectivo zafa de esa rampa y aplasta a nuestro compañero. Ese mismo 9 de septiembre muere un trabajador del INTA, Diego Soraire, y un trabajador de la construcción», relató Néstor Marcolín, delegado de la línea 60.
Y agregó: «De ahí en más, con los familiares de David Ramallo, los delegados del INTA y compañeros de otros gremios formamos lo que se llamó ‘Basta de Asesinatos Laborales’, una organización que, aparte de contener a familiares, cuenta la cifra de muertos que hay todos los años».
«Acá es muy fácil echarles la culpa a los trabajadores. Una locura lo que hizo el INTI, diciendo que David arrancó el colectivo, le sacó el freno de mano, lo puso en directa y se puso abajo. Eso lo haría nada más que un suicida. Le quieren lavar la cara a la empresa», concluyó.
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