El gremio liderado por Antonio Caló se mantuvo firme en su pedido de 35% de aumento en dos tramos, pero los empresarios del sector aseguran que “no llegan”. La negociación continuará el próximo viernes 9 de abril.
En términos futboleros, se podría decir que parece una de esas definiciones por penales interminables. Tras una nueva reunión, la paritaria de la Unión Obrera Metalúrgica Nacional (UOM) volvió a fracasar, sumó un nuevo impasse en la negociación que este miércoles tuvo casi 6 horas de discusión entre las cámaras del sector y el sindicato que lidera Antonio Caló.
Así las cosas, la contienda salarial continuará el próximo viernes 9 cuando se vuelvan a reunir las partes, con la mediación del Ministerio de Trabajo.
La conducción de los metalúrgicos se plantó en pedido de aumento de un 35% en no más de 2 tramos y los empresarios aseguran que «no llegan» a ese número, y se excusan la misma crisis Covid-19, tal el caso del 20% de empleados que no retomó su labor desde marzo de 2020, sea por suspensiones o por estar dentro del personal de riesgo.
Según fuentes de la cartera que conduce Claudio Moroni, “el número está casi acordado, la tirantez radica en la cantidad de tramos para hacerlo efectivo”.
También es cierto que actores de ambas partes vaticinaban un posible acuerdo hoy, que finalmente no sucedió.
Las huestes de Moroni, sin embargo, aseguran “hubo avances”, ya que las partes evaluaron que un fracaso definitivo en la negociación derivaría inexorablemente en medidas de fuerza por parte del gremio, y ni el gobierno ni la patronal del sector quieren eso en este contexto, donde a pesar de las dificultades de la pandemia, se empieza a verificar un efecto rebote en la economía.
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