El Secretario General de la central obrera, Héctor Daer, busca discutir los salarios y dejó en claro que no permitirá que los aumentos queden por debajo de la inflación.
El Secretario General de la CGT, Héctor Daer, rechazó la pretensión de fijar un tope del 30% en los aumentos salariales a discutir en las paritarias de este año que buscan llevar adelante algunos sectores del Gobierno como el ministro de Economía, Martín Guzmán.
«Podemos confluir si hay un seguimiento de precios y le damos dinámica a todas las negociaciones», admitió en diálogo con Noticias Argentinas pero dejó en claro que no se aceptarán incrementos salariales inferiores a la inflación.
Sobre la medida que busca llevar adelante el titular de la cartera, puesta sobre la mesa durante la última reunión del gabinete económico, explicó que todo «pasa por la coordinación de precios y salarios en el marco de un esquema integral de política macroeconómica», diseñada en el Presupuesto 2021. Los supuestos señalan un aumento del 29% y allí están las grandes diferencias entre el sindicalismo y el Gobierno.
El panorama
Según economistas y consultores, la inflación esperada para este año se ubicaría entre el 45% y el 50% mientras que el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), elaborado por el Banco Central, estima un 49,8% para los próximos 12 meses. Por tal razón, Daer no dudó en expresar su rechazo a la pauta salarial de no más del 30% y sobre esto, advirtió: “Nuestra intención es que cuanto más baja sea la inflación, mejor, pero esto se tiene que garantizar”.
Al preverse un aumento de precios del 3,5% para enero, el margen que queda sería difícil de cumplir para el resto del año en relación al Presupuesto. Por esa razón, los recaudos del Secretario General tendrían algo de sentido. «Hay que hacer un seguimiento riguroso, en serio. Todo está demorado, que Economía presente algo sentando en la mesa a los formadores de precios y no a los gerentes, a los lobistas de las cámaras», expresó.
Cabe destacar que si bien las negociaciones paritarias son realizadas por cada sindicato con las cámaras del sector, desde los despachos oficiales se desliza un porcentaje como pauta general para evitar un desborde inflacionario. Como si esto fuera poco, es un año electoral y que todavía sigue atravesado por la pandemia de coronavirus. Por eso, habrá nuevos reclamos para mejorar los salario deteriorados en el 2020.
Hacé tu comentario