Gremios docentes advierten que no hay condiciones “para un inicio de clases normal”

Los principales sindicatos del sector sostienen que las medidas adoptadas por el gobierno, como decretar el fin de la paritaria nacional, no ayudan a que las clases comiencen “en tiempo y forma”. En la provincia de Buenos Aires, el gobierno de Vidal se había comprometido a iniciar el diálogo en diciembre, pero hasta ahora no cumplió con su promesa.

Diego Lanese / Especial para gestión Sindical

Mediante un decreto, el gobierno nacional terminó de sepultar la paritaria nacional, que por ley fue establecida hace varios años y que garantizaba un piso salarial equitativo para todo el país. Lo que se había dado en los hechos el año pasado –el Ministerio de educación nunca convocó a la discusión –se terminó de formalizar en estos días, cuando mediante un decreto el presidente Mauricio Macri termino de confirmar que no reunirá a los sindicatos nacionales, y dejará que las discusiones se den en las provincias. Además, el gobierno busca quitarle peso en la discusión a la CTERA, la confederación mayoritaria que desde que asumió el frente Cambiemos tiene un marcado perfil opositor. Ante este panorama, los gremios alertan que no aparecen condiciones para un “normal inicio de clases”, y piden que haya definiciones respecto del llamado a paritarias y el resto de sus reclamos. “Así como están las cosas no hay buenas perspectiva”, dice la dirigencia sindical todavía por lo bajo. En la provincia de Buenos Aires, la gobernadora maría Eugenia Vidal debía completar el primer llamado a la discusión en diciembre, pero se sigue postergando.

Los gremios nacionales se mantienen en alerta luego del decreto firmado por Macri que termina de eliminar la paritaria nacional docente, un mecanismo incluido en la Ley de Financiamiento del sector. Desde CTERA aseguran que no ven voluntad del gobierno en tener un diálogo próspero, y se encaminan al peor escenario. “No hay condiciones para un inicio de clases normal, y eso es responsabilidad del gobierno nacional y de las provincias”, le dijo a Gestión Sindical una fuente del gremio educativo. Los gremios no quieren hablar de medidas de fuerza, pero afirman que no hay en el oficialismo señales de que vayan a sentarse a discutir de manera abierta. “Quieren poner un techo del 15 por ciento, cuando la inflación supera el 25. No llaman a la paritaria nacional, alientan las desafiliaciones. Están haciendo todo para que no empiecen las clases”, alertaron desde la principal confederación del país.

Si bien los dirigentes son cautos y públicamente nadie habla de medidas de fuerza, en el interior de los sindicatos y ase comienza a pensar en otro inicio de año complejo. Como sucede en el sector universitario, las demandas de los gremios educativos no fueron respondidas, y existe una fuerte hostilidad por parte del oficialismo. Los últimos hechos se dieron en la provincia de Buenos Aires, cuando volvieron a amenazar al dirigente de SUTEBA Roberto Baradel, además de publicar en la página web de la Dirección de escuelas una planilla para renunciar a las afiliaciones sindicales. “Hablan de diálogo pero quieren imponerse debilitando los sindicatos. Parece que no se dieron cuenta que el sector docente es históricamente combativo y movilizado. Y este año no será la excepción”, agregaron desde los gremios.

Esta advertencia se da cuando la justicia le hizo un guiño al gobierno, mediante un fallo que le da la razón en su no convocatoria a la paritaria nacional. El Juzgado de Primera Instancia de Trabajo N°60 falló en contra de la Unión de Docentes Argentinos (UDA), uno de los gremios nacionales, por el amparo presentado al Ministerio de Educación el año pasado, por el cual entendía que, al no convocar la paritaria nacional, incurrían en “una conducta anti sindical y afectaban el derecho constitucional a la negociación colectiva”. La historia, en realidad, se remonta a abril de 2017, cuando la jueza Dora Temis falló a favor de la medida cautelar presentada por UDA, el gremio docente más antiguo de los cinco nacionales. En medio de una fuerte presión para negociar salarios, el Gobierno apeló y recusó a la jueza por animosidad. Solo un mes más tarde, se dio lugar a la apelación oficial y se desestimó el fallo favorable al gremio. La nueva resolución resolvió no hacer lugar a la medida al considerar que el Estado “no incurrió en una conducta manifiestamente contraria a lo establecido ni agravia gravemente los derechos». En sus considerandos, menciona también a los otros cuatro gremios nacionales (CTERA, AMET, SADOP y CEA), por lo cual, es de carácter general. Resuelve que el amparo «no es la vía idónea para resolver materias o cuestiones meramente opinables ni es el medio adecuado para dilucidar el sentido último de preceptos legales complejos”.

En tanto, en la provincia de Bueno Aires también hay cierta impaciencia. Los gremios condenaron la semana pasada la conducta del gobierno de Vidal de alentar desafiliaciones masivas, y mantienen su reclamo de que se comience a discutir la paritaria de este año. El próximo viernes realizarán una actividad en la ciudad de Mar del Plata, para visibilizar su reclamo. En diciembre la Dirección de escuelas debía convocar a los integrantes del Frente de Unidad, según consta en el acta firmada en noviembre de 2017, cuando se reunieron las comisiones técnicas. Pero eso hasta el momento no pasó. Además, ha tensión porque se filtró que la idea del bonaerense es ofrecer un 11 por ciento de aumento inicial, lejos de las pretensiones de la dirigencia. “Nos empujan a un paro” se quejan desde el frente, que se viene movilizando y denunciando las actitudes de la gobernadora y sus funcionarios.