Apuntan a Roberto Fernández por la falta de adhesión de la UTA al paro de la CGT

Sectores del gremio afirmaron que el dirigente, titular del gremio de los choferes de colectivos, negoció con el gobierno nacional para levantar la medida de fuerza. “Está negociando los subsidios a los micros de larga distancia” afirmaron. Por la tarde, la UTA informó que no se plegará a la medida tomada contra la reforma laboral del oficialismo.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

“Nosotros vamos a trabajar normalmente”. De manera sorpresiva, el secretario de prensa de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Mario Calegari, informó que los choferes de colectivos no se sumarán al paro dispuesto por la CGT, en rechazo a la reforma previsional. La medida fue anunciada el lunes previo el tratamiento del proyecto de ley en el Congreso, en medio de serios incidentes entre un grupo de manifestantes y la policía. Si bien el paro comenzó al mediodía, se dispuso que el transporte adhiera desde la medianoche, para permitir que los trabajadores vuelvan a sus hogares. Pero por los dichos del dirigente, los colectivos funcionarán, algo que dejó descolocados a los popes de la central obrero. Desde el gremio sectores que no se encolumnan a su líder Roberto Fernández no se mostraron sorprendidos, todo lo contrario. Adelantaron que el gremio ya había desistido de adherir el jueves pasado al paro que finalmente se levantó, luego de la suspensión de la sesión. Vinculan esta situación a la negociación de los subsidios que reciben las empresas.

La decisión de la UTA causó enojo en Azopardo, donde todas las miradas apuntan a Fernández, el histórico dirigente del gremio. Fuentes cercanas al sindicato explicaron a Gestión Sindical que la decisión “se tomó luego de negociar directamente con el gobierno nacional”. “Fernández negocia directamente los subsidios de las empresas, en especial en tiempos que se autorizan las líneas aéreas low cost. Por eso bajo ninguna circunstancia va a adherirse al paro”, agregó la misma fuente, que recordó que la semana pasada la UTA no se iba a sumar al paro que se anunció, y que luego se levantó por la falta de sanción de la ley. “En vez de ocuparse de los trabajadores da la cara por las empresas, y apoya la baja de jubilación”, criticó la misma fuente.

En declaraciones radiales, Calegari afirmó que “si bien tenemos una reunión prevista en la CGT, nosotros vamos a trabajar normalmente. Lo hemos hecho durante la madrugada llevando a los pasajeros a sus trabajos y creemos que hay que regresarlos a sus casas a la hora que corresponde”. El paro de transporte comenzará a las ccero hora del martes, y algunos creen que Azopardo que hay tiempo para que se sumen los colectiveros, aunque no fueron optimistas.

El triunvirato que maneja la CGT, compuesto por Carlos Acuña, Juan Carlos Schmid y Héctor Daer, resolvió convocar a un paro de 24 horas, desde las 12 de hoy, en rechazo a la reforma previsional que se discutirá en el Congreso. Sin embargo, destacaron que en relación a los medios de transporte la medida de fuerza recién se sentirá a últimas horas de este lunes. Durante todo el día, los aeropuertos estuvieron paralizados. La imagen de la ATC (Air Traffic Control) es más que elocuente: no hubo vuelos que aterrizaran en la Argentina. «Garantizamos que la gente pueda volver a sus casas y a partir de la noche se va a paralizar», planteó Schmid.

Colectivos y trenes funcionarán hasta las 20, cuando la frecuencia comenzará a disminuir hasta llegar a la paralización del servicio, que afectará a todas las ramas y líneas durante las primeras horas de mañana.

En tanto, en la Ciudad de Buenos Aires durante la mañana todas las líneas funcionaron con normalidad, salvo la línea A que no para en la estación Congreso, aunque metrodelegados convocó a una movilización a un cese de actividades de manera paulatina desde las 21. A partir del mediodía se suspendió la actividad de Aerolíneas Argentinas y LATAM. Según informó la aerolínea estatal a Infobae, hay 268 vuelos cancelados de los cuales 97 son de Aeroparque, lo que afecta a 20 mil usuarios. Por otra parte, Latam Airlines informó que son 63 los vuelos afectados por la medida gremial, que alcanza a cerca de 10.500 pasajeros.